El Fondo Monetario Internacional colocó a Venezuela como el país con la inflación más alta del mundo en los últimos 12 meses, en retrospectiva desde octubre de 2020. Las estimaciones del FMI eran superiores a las de organismos públicos nacionales, pero lo llamativo es: la inflación anualizada de Venezuela se medía en un porcentaje de miles (6.500%), mientras que la del segundo país en la tabla, Zimbabwe, tenía una dimensión diez veces inferior (623%). Sin embargo, la vicepresidente ejecutiva Delcy Rodríguez aseguró el 18 de octubre de 2020 que el ciclo de la hiperinflación ya ha quedado atrás.

"Veníamos de una inflación terrible. Hoy todavía Venezuela padece de inflación. Pero salimos del mecanismo de hiperinflación. Los últimos meses el pueblo venezolano ya ha visto que no hay hiperinflación. Aunque sus números de inflación, sin duda alguna, siguen impactando", declaró Rodríguez en Aquí con Ernesto Villegas, el programa dominical del ministro de Cultura.

La economía no es una ciencia exacta como la física o la matemática. No hay un concepto único de hiperinflación, que es una subida descontrolada de los precios durante un período determinado. Pero si tomamos una de las definiciones más aceptadas universalmente, la del teórico estadounidense Phillip David Cagan (1927-2012) en 1956 —luna inflación mensual de al menos 50%, que solo se considera superada cuando ha pasado al menos un año por debajo de ese estándar—, la declaración de Delcy Rodríguez es falsa. Incluso usando las cifras del Banco Central de Venezuela, el país suramericano no había superado en octubre el ciclo de hiperinflación.

Ni por un lado ni por el otro

"El término hiperinflación debe definirse adecuadamente. Yo defino hiperinflación a partir del mes en que el aumento excede 50 por ciento (de inflación mensual) y que solo termina cuando ha permanecido por debajo de esa cifra al menos un año", indicó Cagan en un artículo ya clásico, The Monetary Dynamics of Hyperinflation (1956).

Si nos apegamos a esta definición, para octubre de 2020, incluso según el BCV, Venezuela no había pasado un año seguido con una inflación mensual siempre por debajo de 50%. Hasta ese mes, como es lógico, la estadística disponible más reciente era la de septiembre de 2020. Entre septiembre de 2019 y septiembre de 2020, la inflación superó 50% en al menos dos meses: 52,2% en septiembre de 2019 y 62,2% en enero de 2020. 

Se considera que Venezuela entró en un ciclo de hiperinflación en octubre de 2017. Durante el gobierno de Nicolás Maduro (desde 2013), ha sido frecuente el vacío de data económica oficial del BCV durante largos períodos —hasta de tres años—. Por otra parte, la mayoría de la Asamblea Nacional (Parlamento constitucional en Venezuela) desconoció las elecciones en las que Maduro se reeligió como presidente en mayo de 2018. Ante ambas situaciones, la AN legítima ha publicado sus propias cifras de inflación, que pudieran considerarse también como oficiales.

En esta hoja de Excel elaborada por el equipo de EsPaja.com, pueden revisarse las estadísticas mensuales de inflación tanto del BCV como de la AN durante 2019 y 2020, incluida la inflación anual acumulada para cada mes. Según los datos del Parlamento, la inflación ha superado la barrera del 50% mensual hasta tres veces en 2020: 65,4% en enero, 80% en abril y 55,1% en julio.

"Más benevolente, pero no hay salida"

"Obviamente no es cierto. El concepto de hiperinflación exige que la tasa de inflación sea inferior a 50% por lo menos durante 12 meses continuos y eso no ha ocurrido en Venezuela (...). Obviamente, el ciclo en este momento es mucho más benevolente que en el pasado, pero no se puede hablar de una salida", confirmó el economista Asdrúbal Oliveros a EsPaja.com el lunes 19 de octubre de 2020, a través de un mensaje de voz.